Especies en Peligro de Extinción, Aves, Copihues, el hombre...; solo nos queda la poesía para oponernos a la barbarie.

Copihue, en peligro de extinción, especie "Protegida".

Cabe preguntarse sobre qué le pasa y qué le ha pasado al hombre, individual y colectivamente, que ha acabado produciendo un daño irreparable a todo el entorno; toda la naturaleza lucha por sobrevivir en condiciones cada vez más precarias; la lista de especies que se han extinguido o están en peligro de extinción es interminable, debemos agregar al hombre.

Apocalipsis 2011, destrucción del hombre por el hombre,

nada tiene que ver el Dios imaginario;

“¡Y yo te amo¡”

Los reactores nucleares una y otra vez presentan fallas que afectan y deforman la vida del hombre; los políticos hacen uso de la palabra, palabras que en boca de ellos son pellejos vacíos y con esto pretenden explicar lo inexplicable, claro está, el problema es responsabilidad de todos, de todos y cada uno de nosotros.

 Chucao, quedan escasos ejemplares en insuficientes bosques.

Aceptar el hecho de que somos depredadores implica nostalgia, rabia, pena, sentimiento triste, lamentamos lo sucedido sin saber por dónde se nos ha filtrado la perversidad para con la naturaleza.

Huet Huet, otra víctima de nuestra perversidad y desidia.

Es que deseamos ser dioses, sublimamos nuestra perversidad interior, aunque colectiva, en sueños, en perfecciones que perdonen nuestra malicia; debemos encaminarnos en sentido contrario para detener la barbarie, lograr la  indulgencia de los dioses y aspirar a quedar perdonados para que la naturaleza y nosotros los humanos tengamos esperanzas.

Pidén, pronto será solo un recuerdo para algunos pocos, muy pocos.

Debemos ensayar otras veredas o seguir las ya trazadas hasta tener, cada uno de nosotros, una muerte horrenda, entre horrendas catástrofes, como ya nos está ocurriendo, sin que nos inmutemos siquiera.

  

Colibrí, construyen elaborados nidos, sus huevos son pequeñísimos,

hermosos, leves, si bien no tanto como la levedad del ser.

Por no ser capaces de renunciar a nuestrós hábitos y costumbres, a nuestra avaricia desmedida, a querer tener más y más cada día, estamos afrontando graves consecuencias, los tsunamis se llevan a otros, poco nos importa, pronto vendrán por nosotros, nadando viajaremos a la eternidad o tendremos un enterramiento gratuito quedando bajo los escombros, entonces vendrá una réplica feroz mientras la naturaleza sonríe.

Pájaro Carpintero, ya no quedan árboles para su carpintería ni para

enseñar su arte a la prole en sus frondosos talleres del boscaje.

Necesitamos, para no terminar tan trágicamente, dar a la naturaleza una compensación equivalente al daño que causamos; es una idea delirante e inútil, aunque esté bajo la forma de compromiso; la humanidad ha producido abundantes ilusiones, agreguemos una más; "vamos a permitir que la  naturaleza se recupere", es una ilusión importante, nos asombraremos con la resistencia que ofrece la realidad a nuestros sueños.

  Copihue; los hay blancos, rosados y rojos,

especie "Protegida", en peligro de extinción.

Nuestro deseo de tener más, más y más bienes materiales es inagotable, llegar a tenerlos no termina con la muerte del deseo, el deseo no está destinado a la desaparición, no veremos, nosotros los hombres, la muerte del deseo; nos quedamos con el deseo y con las ilusiones, para no caer en el desánimo necesitamos clarividencia, pero ésta es dificil de adquirir, debemos perseverar, perseverar, las ideas no son más inútiles que las cosas.

Va el hombre, tan campante, cree que lleva una carga de eternidad, una carga de humanidad, en verdad, en verdad, solo lleva una enorme carga de egoísmo,

avaricia y mezquindad, "¡y yo te amo!"

Tal vez algún día podamos celebrar la victoria de la naturaleza que, desde tiempos inmemoriales, hemos reducido a la esclavitud; injusticia que pesa en nuestras espaldas y debiera pesar mucho más en nuestras conciencias.